“Dios nos honra”
A la espera de un milagro
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NASCIÓ DE NUEVO
Hospitalizada con insuficiencia respiratoria aguda, Aldeane sobrevivió sin secuelas
Carlos Fernandes
“Nació de nuevo.” Esta frase popular define lo que le sucedió a la empresaria Natal de 39 años, Aldeane Melo Moreira. Afligida por un fuerte dolor de espalda, acudió a varias citas médicas y tomó medicamentos recetados, sin resultados. La condición empeoró y, en 2019, no podía caminar. “Se indicó cirugía y me hospitalice para realizarme el procedimiento”, recuerda. Sin embargo, lo peor sucedió durante la operación: Aldeane sufrió un paro respiratorio, situación que podría causar la muerte o dejar al paciente con secuelas.
En estos casos es urgente la intubación mediante traqueotomía, cuando se realiza una apertura en el cuello, liberando el paso de la ventilación mecánica. “Simplemente tenía mi corazón trabajando. Después de intentar mucho, los médicos descubrieron que tengo la tráquea torcida”. Fue necesario utilizar un dispositivo para evitar la anomalía, y Aldeane fue trasladada a la Unidad de Cuidados Intensivos en coma inducido. En aquel, la familia ya había sido advertida del riesgo que corría: “podría estar en estado vegetativo”.
Mientras tanto, el Pueblo de la Iglesia Internacional de la Gracia de Dios en Pau dos Ferros (RN) oraba por Aldeane. Incluso en la angustia, ella sabía: que la gracia divina actuaba a su favor. “Intubada, hice una oración, diciéndole al Señor que sabía que era pasajero ese momento”. Después de 24 horas en un coma inducido, despertó. “Desperté y mi conocimiento estaba normal, antes de lo previsto. Los médicos me hicieron varias preguntas y las respondí todas”, dice. “Estaban asombrados, porque mi cerebro careció de oxígeno durante dos horas”.
Después de quitar el tubo, llevaron a Aldeane a la habitación: “El hombre que conducía la camilla estaba cantaba un himno de victoria. Dios actúa en los momentos más difíciles”. Volviendo a la vida normal y a las actividades de la Iglesia, la empresaria da testimonio del poder divino: “Con Jesús, es solo victoria. Estoy muy feliz de ser parte de este bendito ministerio”.