“Padrino” fuerte
Misiones Mundiales – Bosnia y Herzegovina
COMPARTILHE
PACTO CON JESÚS
La vida de la cocinera Quitéria Maria da Silva do Nascimento, de 57 años, se transformó después de conocer a Jesús. En busca de una nueva oportunidad laboral, se mudó a otra ciudad, pero todo resultó diferente de lo esperado.
Quitéria era de otra religión y le pidió a Dios trabajo para su esposo, Cláudio José Barbosa de Barros. Miembro de la Iglesia Internacional de la Gracia de Dios, la hija de Quitéria invitó a su mamá y a su padrastro a visitar ese ministerio. A partir de ahí, nunca se fueron. “Comencé a asistir a los servicios, acepté a Jesús y fui bautizada en las aguas. Desde entonces, Cristo me bendijo”, revela Quitéria.
Cláudio consiguió trabajo y la pareja compró una casa y un automóvil. Hoy, toda la familia sirve al Altísimo. “Solo puedo dar gracias al Señor por lo que ha hecho, está haciendo y hará”, concluye la cocinera.