Oración del Patrocinador – 47
Test – Agosto – 2023
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PLENITUD DE POSIBILIDADES
Manuelly cuenta cómo el Señor la ayudó a vencer la timidez excesiva
Carlos Fernandes
La gracia de Dios se manifiesta de infinitas maneras, en las más diversas situaciones, y el Señor bendice a sus hijos en todas las etapas de la vida, supliendo necesidades y proveyendo vida abundante en medio de los problemas. En el caso de la adolescente Manuelly Sena Pontes, la dificultad a vencer fue la timidez. “Desde pequeña me afectó este tema, y a partir de los 11 años se hizo más fuerte”, relata. Hija de pastores de la Iglesia Internacional de la Gracia de Dios, acompañó a sus padres en cada mudanza requerida por el ejercicio del ministerio. La última mudanza, a la ciudad Manaos (Brasil), coincidió con la fase más aguda de Covid-19. Debido a esto, Manuelly tuvo que pasar más tiempo en casa, sin contacto con amigos.
En una etapa en la que la socialización suele ser intensa, este comportamiento perjudicó a la niña. “Me volví aún más tímida. No sabía cómo hablar con las personas. Me sentía sola tanto en la iglesia como en el colegio”. Manuelly pensaba que era diferente. “Todo el mundo a mi alrededor era capaz de hacer amigos con facilidad, pero yo tenía este impedimento”. Este hecho iincomodó a la familia, y a fines del año 2021, la mamá de Manuelly, la Pastora Carla Sena Pontes, entregó la situación al Señor. “Ella oró por mí, pidiéndole a Dios que me enviara amigos en la escuela y en la iglesia, y que superara mi timidez”.
El año siguiente trajo una nueva vida a Manuelly: “Fue uno de mis mejores años”, dice la niña, feliz de sentirse más sociable. “Ya no soy tímida en los lugares públicos. ¡Tengo nuevos amigos!”, cuenta, celebrando la conquista provista por el Señor. En la sede de la Iglesia de la Gracia en Manaos, donde sus padres trabajan en la obra de Dios, vive las mejores amistades. Su mamá es líder de los Jóvenes que Vencen, y su padre, el Pr. Carlos Alexandre, es el coordinador de los colaboradores. “La Iglesia es el lugar donde somos acogidos. Es importante ser recibido con cariño en las reuniones y que la gente nos trate bien”, comenta.
Ahora Manuelly ejerce sus habilidades comunicativas: trabaja en el ministerio Niños que Vencen, se prepara para ser maestra en la Escuela Bíblica de Niños y forma parte del ministerio de danza. Sobre su futuro profesional, tiene un sueño: estudiar Psicología. El objetivo es claro: “Ayudar a los adolescentes que enfrentan el mismo problema que yo tuve”.