Obrero aprobado
Trabajo preservado
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¡Bendito Dios, Creador de todo el Universo!
Ante ti, oramos por el trabajo que nos has ordenado hacer. Clamamos por Tu dirección y unción, para que los que sufren y los perdidos sean liberados y salvados. Bendice también a sus familias.
Mira especialmente a quien llamas, llevándolo a Tu presencia con todo Tu amor y cariño. Así podrá vivir libre de aflicciones, sin doblegarse ante el maligno, que trae tentaciones, dolencias, dolores y enfermedades. ¡Dios, eres fantástico!
¡Mirad los campos adonde nos enviasteis! Queremos complacerte y actuar como nos enseñas. Con esto, veremos a los oprimidos ser liberados de las fuerzas de las tinieblas.
Rompemos las cadenas del mal que atan a las personas en la falta de fe y prácticas del mundo. Estamos agradecidos porque tus acciones son movidas por el amor que nos rodea y por la fuerza que otorgas a quienes tú destinas a ayudarnos, brindándonos las condiciones necesarias para sostener tu obra.
En el Nombre de Jesús, ordenamos al mal, “¡Vete ahora!”
¡Que los días venideros estén llenos de bendiciones y luz! ¡Amén!
R. R. Soares
