“No puedo identificarme, porque soy de Pakistán y podría ser perseguida”, dice N. El país asiático es islámico y restringe la presencia y la predicación del Evangelio. Sin embargo, no hay barrera capaz de impedir lo que el Señor mueve : “Quiero testimoniar la maravilla que Dios hizo en mi vida”. N. contrajo dengue, una enfermedad causada por la picadura del mosquito Aedes aegypti, y se enfermó gravemente. “No podía comer bien y estaba débil”, recuerda. La asistencia médica le recomendó remedios, que no tuvieron efecto significativo. “Pasaba mucho tiempo en la cama”. Entonces su prima le dijo que Jesús podía sanarla. “Ella envió una petición de oración en mi nombre a la página del Dr. Soares”, dice N. “Recibí una oración tan poderosa que sentí que mi cuerpo ardía. Luego me levanté de la cama y pude caminar”. Desde entonces, ha estado bien. “Fui sanada por Cristo. Le estoy agradecido por esta bendición”.
SÍRIA
Provisión del Señor
F. R. es sirio y seguía otra creencia hasta que conoció al verdadero Dios. Desde entonces vive con restricciones, debido a la severa persecución religiosa en su país, pero relata bendiciones y milagros recibidos del Señor. “Dios ha satisfecho mis necesidades”, dice. Él y su familia fueron invitados a una importante ceremonia de bautismo cristiano en otra ciudad, pero no podían pagar el viaje. “No tenía sentido pedir dinero prestado. Como estoy desempleado, nadie correría ese riesgo”, observa. “Sin embargo, el Señor nos abrió las puertas”. F. R. recibió una carta de un amigo con el que hacía tiempo que no hablaba, y cuál fue su sorpresa cuando encontró, en el sobre, un giro postal. “Ese amigo dijo que era un regalo de Dios para mí”, celebra. Con el monto, él y su familia pudieron participar del bautizo, donde fueron bendecidos. “Doy gracias a Dios por las respuestas a la oración a través de los programas de la Iglesia de la Gracia y del Dr. Soares”, completa.
MYANMAR
En la presencia del Señor
Vivir en Myanmar, una nación ubicada en el sur de Asia, nunca ha sido fácil. Luego de un largo período colonial británico, el país obtuvo su independencia en 1948. Sin embargo, desde entonces, una sucesión de crisis políticas y gobiernos autoritarios han provocado una enorme inestabilidad política y económica en esta localidad. Aun así, los que conocen al Señor allí encuentran razones para estar esperanzados y agradecidos. Este es el caso de Mana, que aunque encuentra “sencillo” su testimonio, no deja de hablar de lo que el Creador ha hecho en su vida. “Hoy puedo alabar el Nombre de Jesús”, señala. Antes no se sentía digno de entrar en la presencia del Dios vivo. “Sin embargo, aprendí que, por la gracia del Padre, tengo el derecho de dirigirme a Él libremente”. Mana agradece las enseñanzas recibidas a través de los medios digitales del Dr. Soares. “Que Dios alcance a más personas a través de este bendito ministerio”.
COLOMBIA
Un corazón nuevo
En 2021, el colombiano Alirio de Jesús recibió el diagnóstico de un problema cardíaco. Sabiendo que los trastornos cardiovasculares son una de las mayores causas de muerte en todo el mundo, estaba preocupado. “Mi padre era espectador del Show de la Fe y me aconsejaba asistir las predicas del Dr. Soares”, recuerda. “Confié en que podía ser liberado y comencé a seguir el programa, pidiéndole al Señor que me sanara”. Días después, a Alirio le hicieron una nueva batería de pruebas y todo le salió bien. “He visto a Dios actuar en mí”, concluye.
PERÚ
Ella vivió el milagro
Durante la pandemia de Covid-19, la venezolana Lorena, que ahora vive en Perú, contrajo la enfermedad en una de sus formas más agresivas. “Pasé un mes entero en Cuidados Intensivos y tuve que ser intubada”, dice ella. “Me desperté con fuertes dolores y secuelas, entre ellas atrofia muscular y articular”. Escuchó de los médicos que tendría que aprender a vivir con dolor y limitaciones físicas. Sin embargo, Lorena comenzó a seguir el contenido espiritual del Dr. Soares a través de las redes sociales y el mensaje de esperanza tocó su corazón. “Así que vine a Iglesia de la Gracia por primera vez y encontré lo que necesitaba”, dice. “Cuando terminé la oración de fe, pude mover mis miembros sin dolor y hacer movimientos que antes eran imposibles”, testifica. “¡Sentí el milagro y estoy agradecida con el Señor!”
MÉXICO
La vuelta de la victoria
En abril de 2022, la mexicana Idalia Reyes descubrió que tenía un tumor en los ovarios. Sometida a una cirugía de emergencia, se sometió a una biopsia del material orgánico, que reveló el sombrío diagnóstico: era cáncer. “Empecé con la quimioterapia, pero tomé una actitud de fe y pedí oración en la página del Dr. Soares en Facebook y en WhatsApp del equipo de la Iglesia de la Gracia en español”. Además, Idalia clamaba durante las transmisiones en vivo del Show de la Fe. “Me realicé nuevos exámenes y, para honor y gloria del Señor, ningún otro órgano había sido afectado por metástasis”, revela. Ella se mantuvo firme. “En enero de este año me sometí a nuevos exámenes y es con inmensa gratitud al Señor que doy testimonio: estoy sanada. ¡Allí di la vuelta de la victoria!”
Alemania
Agente del Reino de Dios
Zehra es turca pero vive en Alemania. Conoció la Iglesia de la Gracia y la Palabra de Dios a través de la página del Dr. Soares en Facebook. “He sido muy bendecida por eso”, dice ella. Ansiosa por difundir el mensaje del Reino de Dios, Zehra comenzó a realizar servicios en su casa y están ocurriendo maravillas. “Alabo el Nombre del Señor por esta oportunidad y agradezco al Dr. Soares por enseñar a tanta gente el camino de la salvación. ¡Que el Señor los bendiga hoy y siempre!”
ARMENIA
“Gracia y paz”
Desde que la Iglesia de la Gracia estableció un templo en Ereván, la capital de Armenia, innumerables personas han sido bendecidas en esa nación ubicada en el borde de Europa. Uno de ellos es el joven Arevik Gagik. “Envío este mensaje para agradecer la presencia de la Iglesia aquí y el trabajo realizado en las redes sociales”, comenta. Recientemente, Arevik se ha sentido atribulada. “Al ver las lives y otros contenidos, fui bendecida con gracia y paz”, asegura. “Doy gracias a Dios por la vida del Dr. Soares y por su Iglesia en Armenia”.